En 1898, 14 años antes del
hundimiento del Titanic, Morgan Robertson, oficial estadounidense de la marinamercante, escribió una novela llamada Futility,
or the Wreck of the Titan (Futilidad, o el naufragio del Titán), en la cual
se relataban hechos que guardaban asombrosos (a la par que inquietantes) parecidos con el hundimiento del Titanic. Muchos son los detalles, mencionados en la novela de Robertson, que se asemejan a ese otro suceso real. Veamos
algunas de esas similitudes.
· Lo primero que llama la
atención es el nombre del barco: Titán. Este ya es de por sí un dato llamativo,
por su parecido con el de Titanic.
· Tanto el Titán como el RMS Titanic
pertenecían a empresas navieras británicas con sede en Liverpool, y con oficinas en
Estados Unidos.
· Ambos iniciaron su fatídico
viaje en abril.
· Según la novela de Morgan
Robertson, el Titán era “el barco más grande del mundo que surcara los mares”.
Como es sabido, el Titanic fue considerado como tal.
· Ambos contaban a bordo con una potente
estación de telegrafía.
· El Titán contaba con dos bandas
de música y dos orquestas para entretener a los pasajeros. En el Titanic había
una sola orquesta, pero esta tocaba en dos grupos musicales, por lo que también
existe gran similitud.
· Eslora del Titán: 245 metros.
Eslora del Titanic: 269 m.
· Ya sabemos que el Titanic no
estaba equipado con botes salvavidas suficientes para todo el mundo, contando
tan solo con capacidad para albergar a la mitad de los pasajeros. Morgan
Robertson fue más cuidadoso con la seguridad de su barco ficticio Titán, en el
que había mayor número de botes, pero, eso sí, el mínimo exigido por ley.
· En el Titanic se construyeron 16 compartimentos estancos automáticos, para evitar el hundimiento en caso
de brecha. El titán utilizaba ese mismo sistema en sus 19 compartimentos.
· 2.223 pasajeros embarcaron en
el Titanic, en comparación con los 2.000 que iban a bordo del Titán, en la
novela de Robertson.
· Como dato semianecdótico: Futility, or the Wreck of the Titan fue
escrita por el estadounidense Morgan
Robertson, y el Titánic fue financiado por el también estadounidense J. P. Morgan. Esto ya es rebuscar demasiado,
pero he creído curioso añadirlo.
Como ves, la novela de Morgan Robertson coincide
misteriosamente en muchos detalles conel suceso del Titanic, y en otros se acerca de manera asombrosa.
Podemos resumir todo este amasijo de datos de la siguiente manera, para sacar de ello la idea principal:
Un señor escribe una novela, en
la que un barco llamado Titán, que es el más grande del mundo, se hunde al
chocar contra un iceberg, mientras atraviesa el Atlántico, y todo esto 14 años
antes de que al Titanic le suceda algo exageradamente parecido. Con prácticamente
el mismo número de pasajeros, tripulación, similares características del buque…
Extraño, ¿no? No creo en temas sobrenaturales, por lo que lo achaco a una muy
llamativa casualidad, digna de ser mencionada en mi blog.
Pero ahora que recuerdo, ¿qué
otra casualidad tiene relación con Morgan Robertson? Hay más. Esto no se queda
aquí, querido lector. Y es que este señor escribió otra novela, en 1914,
llamada Más allá del espectro, en
la que predecía una futura guerra entre Estados Unidos y Japón, donde se
describe un ataque furtivo de los japoneses. ¿Sería la novela un presagio del
ataque a Pearl Harbor? Tampoco lo creo, pero tengo que reconocer que pone a prueba mi sensatez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario